
Manuel GARCÍA MORENTE, Ensayo sobre la vida privada, Excerpta philosophica 4, Facultad de filosofía Universidad Complutense, 2ª ed., Madrid 1992. (También publicado en Ediciones Encuentro, 2001)
García Morente (1986-42), el insigne filósofo de la escuela de Madrid, se ocupa en este breve estudio del trato personal, la amistad, el amor, la soledad y el ensimismamiento creativo. Todo ello lo engloba bajo el término de “vida privada” y lo contrapone a lo que llama “vida pública”, es decir, al trato más o menos formal de las relaciones sociales.
Ya en esta confrontación y terminología se insinúa el principal defecto de la obra.
En primer lugar, nos parece inexacto llamar “vida privada” a estos aspectos de la existencia marcados por la intimidad personal, y que habría que llamar más bien “vida íntima” o “relaciones personales”. La amistad, con todos sus matices y variedades, es ciertamente un fenómeno de la vida privada, pero no toda “vida privada” tiene esta riqueza y profundidad. Basta pensar en los actuales reality shows televisivos, donde la privacy es sinónimo de ramplonería y vulgaridad. No estamos de acuerdo, pues, con afirmaciones del tipo: «Cuanto más privada es nuestra vida, más auténtica y verdadera es; más nuestra, más propia, inconfundible y única» (p. 35). Privacidad no es, en absoluto, sinónimo de intimidad.
Más inexacto aún nos parece la afirmación de que «En la relación pública el hombre no es persona, sino cosa», (p. 29), y por tanto el trato social es esencialmente “despersonalizado”, carente de significado humano: “(una) costra exterior de formas fijas, de conducta estereotipadas, de cosas naturales, en suma (biológicas y sociales), que envuelven la auténtica persona libre» (p. 25). No habría que esperar, por tanto, ningún enriquecimiento personal de este ámbito de la vida; sólo recurriríamos a él por razones estrictamente utilitarias.